Remedios para la Curación
En la medicina popular, se utilizan los arándanos secos en caso de leve diarrea, debido a su tanino. La dosis única es de 1 a 2 cucharadas y de 20 a 60 gr. diarios. Para ello, las bayas desecadas se cocerán un poco a fuego lento. «En la inflamación del colon (colitis) el vino de arándanos puede ser muy recomendable. El verdadero vino ácido de arándanos no es sólo contra la colitis, sino contra todas las enfermedades gastrointestinales agudas o crónicas y la indigestión, la pérdida del apetito, y la debilidad derivadas de eso. La así llamada dispepsia por fermentación y putrefacción -que son disfunciones de la digestión por fermentación y putrefacción en el intestino, se cura rápidamente a través del vino de arándanos. Por lo tanto, el vino de arándanos es el mejor remedio natural contra las enfermedades y padecimientos enumerados anteriormente, porque absorbe y descarga los productos de la descomposición y las toxinas del contenido intestinal.» (Salud a través de Hierbas Medicinales, p 190)
Paracelsus utilizó aceite de arándanos contra las intoxicaciones. «Se añade aceite de arándanos y se cocina en esa malva (Malva silvestre).» (III, 548) Además, se utiliza el aceite de arándanos incluso en la ictericia (I, 949) «extrae el color del miembro» (I, 941), y junto con el coral «reduce la menstruación y las descargas» (III, 196)
El jugo puro del arándanos conservado fresco por medio de la esterilización adecuada, es un excelente gargarismo para la inflamación de las encías (gingivitis) y el catarro de la garganta y la laringe. Además, el jugo elimina «el mal aliento del fumador» y el que se produce al emborracharse con regularidad – muy pequeños sorbos varias veces al día crean una cierta aversión a fumar.
Las hojas de arándano también tienen propiedades curativas. Es muy importante destacar que las hojas deben recogerse antes de la maduración de la fruta, de manera que la sustancia médicamente activa, la mirtilina, esté todavía presente en la hoja. Cuando las hojas se recogen junto con las bayas, no tienen ningún efecto curativo. Las hojas de arándano, cosechadas en el momento adecuado, son un excelente remedio para la diabetes. La mirtilina de las hojas del arándano actúa como «insulina herbal». No hace falta decir que al mismo tiempo no debe faltar un control médico regular. Una cucharada de hojas secas se remoja en una taza de agua caliente. Después de 10 minutos se cuela y se deben beber 2 a 3 tazas de té de hojas de arándano por día. Este té también es bueno en caso de catarro de los uréteres.
El Pastor Künzli recomienda hojas de arándano en la pérdida del cabello. «La decocción de hojas de arándanos frescos o secos es un remedio eficaz para la pérdida del cabello. La aplicación es simple. Se frota el cuero cabelludo con el cocimiento todas las noches.» (Das GroßeKräuerheilbuch, El Gran Libro Herbario, p 336).
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